23/3/11

Cuando es indescriptible no es necesario describirlo.
Cuando se hace intolerable es demasiado pensarlo.
Cuando se vuelve rutinario lo creemos innecesario.
Cuando nos miramos a los ojos no nos vemos como queremos
Cuando caminamos por la calle nos movemos sin saberlo
Cuando combinamos las palabras nos convencen las metáforas.